The peoples must condemn Israel’s warmongering

The ongoing aggression of the murderous Israeli state—particularly in Palestine—is now spreading to other countries in the region. We strongly condemn the Israeli attack on Iran, which also targeted civilians, and express our solidarity with the people of Iran.

This act of aggression by Israel cannot be seen in isolation. All of its imperialist allies—including the United States, NATO, and the European Union—bear responsibility, whether through direct or indirect support, ongoing military, trade, or political cooperation. Regardless of the statements issued by these imperialist centers, this attack draws its justification from the rising tensions with Iran—tensions deliberately escalated step by step by the US, NATO, and the EU. The US President’s attempts to distance himself from the consequences of this attack do not change this reality.

Furthermore, it is disingenuous to look for sincerity in the statements of Israel—a state that has been committing genocide in Palestine for months—or of the United States, a leading imperialist power that has brought nothing but war and destruction wherever it has intervened. Their opposition to nuclear armament is hypocritical, especially as they continue to saturate our region with nuclear weapons for their own strategic interests.

It is the imperialist system itself that continues to wield nuclear power as a threat—ignoring the tragic lessons of human history—and dragging the world toward an unthinkable catastrophe.

We should underline that the governments in our countries also bear responsibility by failing to confront Israel’s aggression and maintaining various forms of relations with it despite this grim reality it perpetuates and the crimes it commits.

We condemn the aggression of the Israeli state, which threatens all of humanity, and we call on the peoples to build strong resistance against this threat and to intensify their struggles and solidarity.

Communists, who have always been in the forefront of the anti-imperialist struggle, continue their explanatory, propaganda and agitation work to prevent further aggression. We call on the world communist movement to intensify mobilization work among workers in their countries to prevent the nuclear war looming over humanity.

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Los pueblos deben condenar el belicismo de Israel

 

La actual agresión del asesino Estado de Israel —de forma particular en Palestina— se expande ahora a otros países de la región. Condenamos con vehemencia el ataque israelí a Irán, que también ha disparado contra civiles, y expresamos nuestra solidaridad con el pueblo de Irán.

Este acto de agresión de Israel no puede verse como algo aislado. Todos sus aliados imperialistas —incluyendo Estados Unidos, la OTAN y la Unión Europea— tienen responsabilidad, ya sea con apoyo directo o indirecto y con la actual cooperación militar, comercial o política. Independientemente de las declaraciones publicadas por estos centros imperialistas, este ataque se justifica a partir de las tensiones crecientes con Irán; tensiones que han escalado de manera deliberada y paso a paso EE.UU., la OTAN y la UE. Los intentos del Presidente de EE.UU. De distanciarse de las consecuencias de este ataque no cambian dicha realidad.

Además, es deshonesto buscar sinceridad en las declaraciones de Israel —un Estado que ha estado cometiendo un genocidio en Palestina durante meses— o de Estados Unidos, una potencia imperialista dirigente que no ha traído más que guerra y destrucción allá donde ha intervenido. Su oposición al armamento nuclear es hipócrita, especialmente cuando siguen saturando nuestra región con armas nucleares en pro de sus propios intereses estratégicos.

Es el propio sistema imperialista el que sigue blandiendo el poder nuclear como una amenaza —ignorando las lecciones trágicas de la historia humana— y arrastrando al mundo hacia una catástrofe impensable.

Debemos subrayar que los gobiernos de nuestros países también tienen responsabilidad al no poder confrontar la agresión de Israel y mantener distintas formas de relaciones con él, a pesar de esta macabra realidad que perpetúa y de los crímenes que comete.

Condenamos la agresión del Estado israelí, que amenaza a toda la humanidad, y llamamos a los pueblos a construir una resistencia fuerte contra esta amenaza y a intensificar sus luchas y la solidaridad.

Los comunistas, que siempre hemos estado al frente de la lucha antiimperialista, seguimos nuestro trabajo explicativo, propagandístico y agitativo para impedir una mayor agresión. Llamamos al movimiento comunista mundial a intensificar el trabajo de movilización entre los trabajadores de sus países para impedir la guerra nuclear que se cierne sobre la humanidad.